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sábado, 18 de marzo de 2017

Latas de carne rusa. El sabor erótico de mi adolescencia.

Esta carne en Cuba nadie sabía de que era. Aunque el diseño de la misma tenía una vaca. Todos decían que sabía a Aura tiñosa u Oso. ( Cathartes aura, técnicamente)
Es que venía de la URSS, que la mayoría odiábamos, pero que nos imponía el gobierno sí o sí. Además, el hambre termina por convencerte de cualquier cosas y la devorámabos sin cocinar.

Hay que aclarar que hubo cosas extraordinarias que nos dejaron los rusos. El cine, y una literatura que he recuperado poco a poco en mi exilio, por no hablar de la música el pintura medieval. En Fin.
Ahora esta carne rusa era y es horrible. Después de años de reeducación de mi paladar en Europa. Encontré (hace un tiempo) una tienda de productos rusos en el barrio del Raval y me compré esta lata carne rusa. Así de terrible es la nostalgia y el desarraigo.

Sigue siendo horrible y grasosa y ni muerto se la doy a probar a mi hija. No obstante, cuando la probé, me vino a la mente aquel adolescente que fuí en mi primera escuela al campo en Güira de Melena en las afueras de La Habana, justo en el momento en que una chica que era mi novia,  me lavaba la cabeza con champú por primera vez.

Ella seguro no pensaba que eso fuera un acto erótico. Yo sí. Y esta lata de carne rusa ha sido la puerta por donde ha entrado ese recuerdo. El recuerdo es más importante que su sabor.



Nota

La tienda tiene un nombre Delicioso...
"TROIKA DELICATESSEN"
Carrer de la Unió, 3, 08001 Barcelona
El Raval
Llama al 933 017 231