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viernes, 3 de febrero de 2017

Casa de las Punxes en Barcelona. Cayendo la tarde sobre el modernismo.


No siempre estoy feliz con las fotos que hago para mis posts. Esta de lacasa de las Punxes, en Barcelona cayendo la tarde, me gusta mucho. Capta algo más de lo que yo no ví. La atmósfera del contraluz es tenebrosa. Hasta en brumas esta casa que embellece el paseo de la Diagonal es bella.
Recuerdo el entusiasmo de una amiga cuando la puse  delante, íbamos en mi coche salió de él sin avisarme para hacerle foto. Estaba de visita y quería llevarse ciertos edificios de aquí metidos en la cámara.




El arquitecto catalán Josep Puig i Cadafalch hizo esta joya en 1905.

Amo a Anne Sexton abrazada a su propia escritura.

Amo Anne Sexton descalza frente a su máquina con las piernas abiertas. Corrigiendo un texto sobre el rodillo de la propia máquina, así comencé a escribir yo también y este recuerdo es una memoria dulce de lo que soy. Esta imagen ya no volverá, ahora los escritores corregimos en la propia pantalla, aunque abrazamos el texto que vamos escribiendo sobre el tablet con la misma pasión
La existencia es un buen texto. 
Todo lo demás está de más.

Anne se suicidó con 45 años en 1974.

"En Cartas para el Doctor Y, que dejó inédito hasta después de su muerte, invoca tozuda su única suerte: “Muerte, / necesito mi pequeña adicción a ti, / necesito esa vocecita que, / hasta cuando asciendo desde el mar, / toda una mujer, completa, / dice mátame, mátame”. El 4 de octubre de 1974, tras revisar las galeradas de su manuscrito, El horrible remar hacia Dios, y almorzar con su editor vuelve a su casa. Allí se ​​pone el abrigo de piel de su madre y se quita todos los anillos. Se sirve un vodka y con el vaso en la mano entra en su garaje y se encierra. Y allí, sentada al volante de su automóvil, un Ford Cougar de color rojo, enciende la radio. Y el motor."