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lunes, 25 de julio de 2016

Vieux Nice... calles estrechas y vaginales que recuerda Sevilla.

La estrechez vaginal de Nice/Niza me recuerda a mi Sevilla natal en Europa. Los edificios siempre están a punto de caer sobre ti. La diferencia con Sevilla es el color. Allí prima más el amarillo albero, y aquí se va al naranja y turquesa como la costa azul  que lo toca en las ventanas. 

El 1er mensaje al llegar a Niza es del gobierno español y no de movistar. Verano 2016.

En más de una ventena de viajes a Francia desde España, cruzando la frontera en coche o avión  nunca había recibido un mensaje orientativo y de seguridad del gobierno español a través de mi compañía,  como primer mensaje en mi teléfono. Parece que he llegado a otro país. No sé si esto me hace estar más seguro. Me hace tomar conciencia de que algo a cambiado tras tantos atentados y descerebrados sueltos..  

Maya conversa con azafata de avión.

Hemos viajado mucho juntos, pero ella ya lleva su maleta, su tarjeta de embarque, y su propia conversación con las azafatas que le preguntan si viaja sola o con alguien.  Da todas las respuestas y me mirá. Mira a los grupos de chicas diez años mayor que van solas y me pregunta ¿pápa así iré yo con la Sarah, la Enma, y la Clara... y le digo,  si mi amor... dentro de poco vuelas... y yo estaré pendiente del móvil y tus fotos....

Mi homenaje a las víctimas en Nice/ Diez días tras los sucesos del 14 de julio. 2016.

Trato de no ser explícito con mi hija de 8 años sobre lo sucedido en Nice hace sólo diez días. Ella al ver tantos osos peluches, dibujos, banderas, reconoce la suya, de Catalunya, y de tanto escucharnos hablar entrecortanos y verme con lagrimas me dice:
¡Papa, todos esos peluches son de niños que han muerto! Le digo; - No mi amor, son a niños que murieron  en ese accidente que te conté en la mañana cuando fuimos a la playa y vimos en el Paseo muchos corazones y flores. Es la forma que tienen los niños de Nice de que las familias de esos niños sientan que mucha gente piensa en ellos.
Pensé, que toda esta cantidad de peluches, es equivalente a casi todos los niños residentes en Nice, que han vivido de una forma u otra forma esta  experiencia. Una generación de personas que estará marcada por esta tragedia...
Una ciudad más después de tantas occidebtales y orientales en la lista, sin saber cuales serán al final. Es lo que hay estando aquí.  

Niza intenta salir del abismo. Agosto 2016.

Dando una vuelta por el centro histórico de Nice voy a una tienda de sombreros donde hace un año conocí a una argentina cuya hija estaba de Erasmus en Barcelona.
Nos reconoció al instante y me dijo me "¡jodieron duro ¡que terrible!, ¡que noche! Que viento tan fuerte y ¡que voludo! Gracias por venir nos falta mucha gente " Sabes, -me voy de vacaciones, antes lo primero era el trabajo, para mí ahora ¡es la vida ..,! Solo le dije, haces bien. Y yo iba a venir Sí o sí, a mi no me cambian los planes un loco. 

Pienso en mis amigos músicos de Barcelona mientras andamos. Hace un año casi en cada restaurante habían músicos de jazz, rock, salsa clásica,  tocando en las plazas,  y éstas estaban a reventar; y nos asombraba el hecho de tener que reservar antes de salir.
Hoy falta la mitad del turismo a simple vista. Espero que se animen a volver. La vida sigue, les guste o no a esos hijos de la muerte que intentan poner la tragedia por encima de la vida. 


Un jardín- parque de juego cerca de casa en Nice

Viajar con hijos menores de edad como mi hija, tiene el encanto de que te hace mirar sus intereses, además de adaptarse a los suyos.
Este es el caso de haber encontrado este jardín con vocación de parque muy cerca donde vivíamos en Niza. 

La hermosa planta que lleva en las manos ella la eligió para mi sobrino. No es del jardín.