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domingo, 24 de marzo de 2013

La despedida de Bebo Valdés en casa teatro Malena. Barcelona.

El viernes en la noche, la actriz María Elena Espinosa nos habia convocado a un grupo de amigos para leer poemas últimos, cantar canciones y recibir la primavera desde el Eixample barcelonés, cuando llegué todo giró a un homenaje velado a Bebo Valdés, que había muerto, ese día en Suecia, donde había emigrado en 1960. Yo desconocía la noticia, y lo primero que pensé fue en las manos suaves de Bebo el día que lo conocí en els Jardinet de Gràcia. Él daba un concierto en el Forum de la Culturas con Carlinhos Brown en el 2004 y estaba alojado en el hotel Casa Fuster por donde pasaba. Júro que no pensaba ir al concierto pero verlo me género un desasosiego que tuve claro que era una señal evidente de que tenía que ir. El concierto fue un éxito con más de veinte mil personas bailando al ritmo de éstos músicos, las mismas que habían ocupado el recinto con Fito Páez, u Orishas. No pude decirle ese día que conocía su casa de la Víbora donde enseñó a tocar el piano a su hijo Chucho con solo cuatro años. Tampoco que mi reseña de su disco "El arte del Sabor" su disquera Lola Record la tenía como referente en su web después de publicarla en la revista digital encuentro en la red.
La velada en casa Teatro fue excelente, Maria Elena tiene el don de agrupar espíritus libres que fomentan una forma artística que va en las palabras o más allá de estas. La banda sonora de la noche fue un homenaje al tango, el bolero, el bossa; con el matiz, de que los tangos los cantó, una catalana parlante Martha Boldu acompañada por su pareja y guitarrista poeta; y los boleros fueron cantados a capella por un cantante brasileño, Diogo, y las canciones en portugués, por un actor y cantante cubano Jorge Ferrara algo que indirectamente estaba en la esencia musical de Bebo, quien en los años cincuenta fue arreglista de las canciones en español del norteamericano Nat Kint Cole; y en el siglo XXI provocó otra revolución con sus arreglos de boleros cubanos-aflamencados en la voz de Diego el Cigala.
Yo después de un tiempo sin leer en público leí poemas de exilio, sin pensar, lo pienso ahora,
 que Bebo también era un exiliado que bien le servirían estos versos...
"Los que no han visto estos cuerpos de invierno y ojos de verano/ escriben desde la isla sin saber que cuando escapas del sistema llevas la sangre por fuera/ eres fácilmente reconocible"