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lunes, 14 de marzo de 2011

Emigración: Made in China


No son pocos los que se quejan de la arribada de la emigración china a las ciudades españolas. Lo curioso, que roza la hipocresía en muchos casos, es que los mismos comerciantes españoles grandes y pequeños propiciaron la llegada de los asiáticos importando durante los años ochenta y noventa material Made in China a bajo costo. Durante años, Zara (cuyo dueño, Amancio Ortega, es el número siete de los más ricos de la Lista Forbes de marzo 2011), Mango, Adolfo Domínguez y otros, han utilizado mano de obra china para sus productos. Los chinos, por su parte, utilizaron a éstos para entrar en este país como en un Caballo de Troya griego. Ahora, cuando dominan a la perfección los gustos y las debilidades del mercado español, han aterrizado, y se han colado por las grietas del sistema.
He experimentado esa evolución de cerca en un barrio barcelonés donde vivo desde hace diez años: Gràcia.
Una catalana me dijo en el 2001 cuando buscaba piso que no lo hiciera en Gràcia porque eran muy catalanistas y me sería difícil encontrar algo, no fue exactamente así, pero sí noté que era un barrio donde la emigración latina, árabe y asiática no era frecuente en la convivencia cotidiana, solo los pakistaníes comenzaban a administrar pequeños supermercados con flexibilidad horaria los fines de semana.
Exígete mucho a ti mismo y espera poco de los demás. Así te ahorrarás disgustos. Confucio


En cambio, los chinos fueron llegando más tarde, y comenzaron con los antiguos negocios de "Todo a cien", luego con los restaurantes de comida china, y de ahí pasaron a las cafeterías de barrio, sustituyendo a las catalanas de toda la vida y a otros restaurantes donde, para asombro de muchos, mantienen el eje de la cocina tradicional catalana: calçots, paella, escalivada, crema catalana o bacallà a la llauna, muy lejos de los tópicos restaurantes chinos de dragones en las puertas, se han hecho con las fruterías, las peluquerías, los negocios de uñas postizas, masajes, etc. Han flexibilizado y bajado precios, abren más temprano bares y
cafeterías, incluso los fines de semana, y cierran muy tarde, además de otras muchas novedades que nos han inundado.

Echo en falta que su cultura milenaria literaria no inunde sus negocios con, por ejemplo, frases confucianas o con pinturas tradicionales, clásicas o eróticas. Una frase pá los cubanos: ¡Extraño mi arroz frito y mis maripositas con salsa agridulce del restaurante Pekín en 23 y 12!

¿Me preguntas por qué compro arroz y flores? Compro arroz para vivir y flores para tener algo por lo que vivir.
Confucio

2 comentarios:

  1. He vivido en Barcelona varios años y sé de qué va la cosa. Un ciudadano español, no hubiese encontrado las facilidades que relatas en el ensayo. El nacionalismo arremete en contra de todo lo que huela a Made in Spain. Resulta que a ciertos comerciantes españoles (según fuentes testificales)por rotular en el idioma de España se les multa. El Chino tiene más suerte, me alegro por ellos. Dígánle a Arthur Mas que les exija el catalán a chinos, pakistaníes, etc.

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  2. Saludos Compatriota Arsenio, mi nombre es Alfredo Pong Eng, nací en la clinica china de Lawton Kow Kong en 1951
    Muy interesantes sus articulos, soy hijo de española criada en Canton China y chino criado en Cuba, he escrito varios articulos sobre los chinos en Cuba, veo que por parte de la Cuba de hoy se omiten muchos datos historicos y por otra parte se le da un caracter errado a la historia de la presencia china en Cuba sobre todo despues del 59.En Cuab y en el barrio chino donde mi familia poseeia negocios y vivimos una buena parte de mi niñez no se habalaba otro dialecto que no fuera el cantones, yo aprendí a habalr español a los 7 años. Hoy vivo desde 1991 en Miami.
    Muchos de mis articulos y caricaturas las puede ver en mi blog: www.cubahumor.com desde 2006

    Saludos y puede contactarme si asi lo desea por: elchinopong@yahoo.es

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